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EL LIBRO AZUL

EL LIBRO AZUL

EL LIBRO AZUL

  
 
NOTA INTRODUCTORIA
  

Hace casi un mes en el Museo de  la Nación de Lima, Perú, se llevó a cabo la presentación del LIBRO AZUL BRITÁNICO/ INFORMES DE ROGER CASEMENT Y OTRAS CARTAS SOBRE LAS ATROCIDADES EN EL PUTUMAYO. El acto fue organizado por el  CAAAP ( 1) y el IWGIA ( 2). La traducción correspondió a la antropóloga peruana LUISA ELVIRA BELAUNDE, ausente en el evento por motivos de viaje.

 

En la presente entrega se  consigna la presentación del libro a cargo de FREDERICA BARCLAY. Al final agrego algunas rápidas reflexiones personales sobre la visión de las Amazonía peruana en las novelas de MARIO VARGAS LLOSA y  una breve nota sobre JOSÉ MARÍA ARGUEDAS.

 

La novela “EL SUEÑO DEL CELTA”  está relacionada con el tema. También lo está pero  con mayor organicidad y perspectiva  el libro IMAGINARIO E IMÁGENES DE LA ÉPOCA DEL CAUCHO: LOS SUCESOS DEL PUTUMAYO. CAAAP/IWGIA/UPC, Lima, 2009. Allí  ALBERTO CHIRIF y MANUEL CORNEJO CHAPARRO  escriben y editan  textos  de JEAN-PIERRE CHAUMEIL, JUAN ÁLVARO ECHEVERRI y MARÍA EUGENIA YLLIA MIRANDA.

 

Existe además una película de FEDERICO GARCÍA: “El SOCIO DE DIOS” y una novela suya con el mismo nombre. Es  indudable que el caso del Putumayo y la Era del Caucho en su conjunto constituye un atroz capítulo de la  ancestral y reiterada HISTORIA DE LA IMPUNIDAD EN EL PERÚ, la misma que obviamente no  empieza con el registro que hizo JORGE BASADRE  en su libro “SULTANISMO, CORRUPCIÓN Y DEPENDENCIA EN EL PERÚ REPUBLICANO” (1981).

 

Es sintomático que todos aquellos que ejercieron  sevicias innombrables y crímenes contra la humanidad a lo largo de la historia lo hicieron siempre  en nombre de Dios.

 
El caso de ARANA  es de una impunidad escalofriante. Sobre su historia y la Era del Caucho existe suficiente material pero se necesitaría una creativa síntesis interpretativa que  se sumerja en las dinámicas profundas  de las  mentalidades y sus fallas ontogénicas que generan  instituciones subjetivas complejas  como El Mal, nacido-entre otras razones seguramente-  del  deseo tanático  de la ansiedad ególatra por acumular  riqueza sin límites y perpetrar genocidios contra la alteridad.
 
 
Me he permitido la colocación de algunas Notas de Pie de Página puesto  que  LISTASTEMATICAS llegan a países donde no necesariamente  conocen detalles de algunos de los protagonistas nombrados.
 
TEXTO DE LA PRESENTACIÓN :
 
AUTORA: FREDERICA BARCLAY ( 3)
 
Esta publicación es un viejo proyecto de Alberto Chirif ( 4), quien al menos desde fines de la década de 1980 estuvo empeñado en hacer traducir y publicar esta documentación además de otros materiales que han sido publicados en los últimos años, en Iquitos y Lima. Gracias a este empeño, en el que le ha acompañado en los últimos años Manuel Cornejo del CAAAP, hoy en día los estudiosos y el público disponen de un conjunto de fuentes que permiten conocer de primera mano y sin filtros lo que ocurrió en las cuencas del Putumayo( 5 )a inicios del siglo XX. La obra permite a su vez dar una mirada a una compleja coyuntura política nacional e internacional.
 
El LIBRO AZUL, que da título a esta publicación, es el informe que el gobierno de Gran Bretaña presentó en 1912 al Parlamento británico, y formalmente al gobierno peruano, sobre “el trato dado a súbditos británicos e indios nativos empleados en la recolección de gomas en la zona del Putumayo”, hace exactamente 100 años. 
 
Entre los documentos que componen esta publicación figura de manera prominente la correspondencia entre Roger Casement (6 ), Cónsul General de Gran Bretaña en Río de Janeiro, y Edward Grey, el entonces Ministro británico de Asuntos Exteriores, en relación al modus operandi de la Peruvian Amazon Co. Esta correspondencia incluye las cartas y telegramas con los informes, interrogatorios y otros anexos recogidos por Casement durante sus dos visitas a Loreto, en 1910 y 1912.
 
El cónsul Casement, había sido comisionado para estudiar la situación de los súbditos británicos, originarios de Barbados, contratados por la Peruvian Amazon Co., la empresa que el cauchero peruano Julio César Arana ( 7) registró en 1907 en Inglaterra sobre la base de las propiedades de la Casa Arana. Algunas denuncias habían aparecido ese mismo año en la prensa de Iquitos y rebotado en Londres, las que dos años más tarde se convirtieron en un escándalo de grandes proporciones cuando un semanario inglés publicó una serie bajo el título del “Paraíso del diablo”, indicando que el caso guardaba similitudes con los abusos perpetrados en el Congo belga que Gran Bretaña había documentado exhaustivamente.
 
Estas noticias derivaron en interpelaciones en el parlamento inglés al gobierno británico, que forzaron a éste a llevar a cabo una investigación y ejercer presión sobre el gobierno peruano para remediar la situación. Ello a pesar de que a la fecha ambos gobiernos estaban en los mejores términos tras la firma de un nuevo convenio con la Peruvian Corporation Ltd., la de los ferrocarriles, que solucionaba algunos temas pendientes del Contrato Grace de 1889.
 
Fue la participación  de súbditos británicos como empleados de la empresa “británica” denunciada lo que justificó el viaje de Casement, y son las espeluznantes entrevistas con 30 de estos Barbadenses lo que le permitió confirmar que las denuncias de la prensa no constituían una exageración. En base a sus investigaciones y el estudio de los registros de la empresa Casement estimó que en el Putumayo se exterminó  a 30,000 indígenas, principalmente Huitoto, Ocaina y Resígaro. Casement también desnudó los perversos mecanismos con que operaba la Peruvian Amazon Co.
 
Las investigaciones conducidas por los jueces peruanos Valcárcel y Paredes (8 ) a raíz de la presión externa, confirmaron los hechos en todos sus extremos y ofrecieron evidencias adicionales de crímenes contra la humanidad. Sin embargo, y a pesar de los señalamientos del Juez Paredes, Arana y los principales jefes peruanos lograron evitar la cárcel y éste tuvo tiempo de encargarse de la disolución de la empresa registrada en Londres y de tramitar la recuperación de sus activos, principalmente la posesión de sus propiedades en el Putumayo.
 
El LIBRO AZUL además contiene la correspondencia diplomática en torno a este tema entre el Ministro de Asuntos Exteriores británico y funcionarios británicos en Lima, Iquitos y Washington y con la Cancillería de los Estados Unidos en torno a los procedimientos adoptados para conseguir que el gobierno peruano, entonces presidido por Augusto B. Leguía, tomara cartas en el asunto.
 
En esa medida el LIBRO AZUL ofrece también una mirada a un interesante capítulo de la historia diplomática del Perú y de los países de la cuenca Amazónica así como de la economía política de la época.
 
Justo cuando el cauchero Arana logró el registro de su empresa en Inglaterra se constituía también un sindicato con inversionistas norteamericanos (Hnos. Selleck) sobre la base de unas propiedades otorgadas por el gobierno colombiano a una empresa colombiana, Cano, Coello & Cía. El Putumayo era una zona en disputa entre Colombia y Perú lo que explica que los empresarios caucheros adoptaran en la época la estrategia de asociarse a inversionistas extranjeros y de registrar sus empresas en el exterior en procura de garantías ante eventuales disputas territoriales. A la postre las denuncias de la violencia ejercida contra los indígenas fueron tan tremendas que quien asumió la cerrada defensa de Arana fue solo el gobierno peruano.
 
A pesar de que el gobierno de Leguía encumbró a Arana como el defensor de la soberanía nacional su accionar nada tenía que ver con lealtades nacionales, sino con un negocio de alta rentabilidad. Otro tanto ocurrió en Colombia que igualmente respaldó a sus caucheros, negando que antes de Arana ya hubiera existido en el Putumayo un régimen de fuerte violencia contra los indígenas.
 
Las propiedades otorgadas por el gobierno colombiano a Cano y Coello venían aparejadas de la cesión del derecho de navegación de los ríos Putumayo y Caquetá y de la obligación de abrir vías de acceso hacia la región conformada por ambos ríos. Pero endeudados y amedrentados por Arana, Cano & Coello terminaron cediendo su concesión al cauchero peruano.
 
Por su parte Arana no tuvo reparos en asociarse con otros inversionistas y políticos colombianos como el diplomático Enrique Cortés, que en 1907 era Ministro Plenipotenciario de Colombia en Washington, quien no solo era su agente comercial en Londres, a través de The Cortes Commercial & Banking Co. Ltd., sino que fue socio fundador de la Peruvian Amazon Co., habiendo estado representado en su junta directiva por el director Medina. Podemos especular que de esta manera Arana confiaba en que podría buscar eventualmente la protección de Colombia en caso que el territorio del Putumayo se determinara colombiano en algún momento.
 
Cuando la Peruvian Amazon Co. vio que Gran Bretaña, donde estaba registrada la compañía, le daba la espalda –viéndose el gobierno presionado tanto por el parlamento como por la Sociedad Antiesclavista y la opinión pública – Arana volvió nuevamente sus ojos al Perú y recordó a las autoridades que su presencia era la única garantía para la soberanía peruana en el Putumayo.
 
Basado en un criterio geopolítico, e influido por Arana que además tenía cooptadas a las más altas autoridades regionales al actuar de agente bancario para pagar sus sueldos y movilizar al personal, el gobierno peruano cerró filas con el cauchero y negó cuanto pudo los hechos denunciados. Las autoridades llegaron a asumir y emplear el argumento de Arana de que la violencia en el Putumayo era causada por la barbarie y el canibalismo de los indígenas y que la tarea que llevaba a cabo era llevar la civilización a zonas remotas empleando la mayor delicadeza. Por eso también el gobierno permitió y alentó al cónsul peruano en Manaos, Carlos Rey de Castro, a actuar directamente como su principal publicista. Incluso en 1911, en el momento de la mayor presión, el gobierno peruano nombró a Arana su representante ante la Exposición Mundial de Caucho que se celebró en Londres, ese año, encargo al que finalmente se vio obligado a renunciar.
 
Esta posición del gobierno de Leguía (9) coincidía con los esfuerzos llevados a cabo por el gobierno peruano por crear un clima que atrajera la inversión británica hacia el Perú y cuando negociaba en Londres un empréstito por 450,000 libras esterlinas. Paradójicamente por la misma época las potencias europeas debatían la creación de una Corte Penal Internacional se proponía administrar justicia sobre un código internacional de derecho penal humanitario, un intento que fracasó en 1909. ¿Hubiera podido ser éste un caso para esa corte?
 
Solo ante la apremiante presión del gobierno británico se ordenó una investigación judicial -llena de obstáculos como denunció el Juez Valcárcel-, y más tarde se aceptó la participación del gobierno británico en la investigación de la que formó parte Roger Casement. Las presiones británicas  no cesaron hasta la publicación del LIBRO AZUL en 1912, lo que se hizo de común acuerdo con el gobierno norteamericano, acto motivado explícitamente  por falta de compromiso del gobierno para asegurar que los culpables fueran castigados de acuerdo a lo dictaminado por el Juez Paredes.    
           
En Londres, el Encargado de Negocios en la Legación peruana, Eduardo Lembcke, recibió del gobierno de Leguía  reiteradamente y hasta el último momento instrucciones de desmentir las denuncias aparecidas en la prensa británica. Pero a lo largo del tiempo se hizo tan evidente que en el Putumayo se había cometido las mayores atrocidades, que un año antes de que el LIBRO AZUL fuera publicado, Lembcke vio necesario insinuar al gobierno de Leguía que debía actuar porque la publicación del informe de Casement produciría un “terrible efecto en el mundo civilizado por los detalles que contiene sobre los horrores cometidos en esas apartadas regiones...” (Lembke a Lima, 7.7.1911). Es que además en 1850 Perú había firmado con Gran Bretaña un tratado que establecía la obligación de no permitir la esclavitud, por lo que Lembcke anotaba que se corría también el riesgo de que el gobierno británico lo catalogara como un país donde persistía la esclavitud, con sus consecuencias para el comercio y la reputación del país (Lembcke a Lima, 19.7. 1912, # 125 Putumayo).
 
Diversos estudios han analizado la documentación de Casement para tratar de entender la aparente irracionalidad económica de la empresa de Arana que implementó un régimen de terror y asesinatos masivos de indígenas cuando en realidad la extracción de las gomas dependía de esa mano de obra. Casement dio la clave al relievar el hecho de que la empresa de Arana ofrecía primas a sus funcionarios en función del volumen extraído, una política implementada para situarse como el principal productor en el Amazonas peruano y lograr su registro en Londres y que alentó la sobreexplotación de la mano de obra y la necesidad de reprimir cualquier resistencia. Otros observadores de la época hicieron notar que los peones esclavos poco le costaban y podían ser repuestos “acorralando las tribus a bala”. Se trataba de una lógica extractivista no solo sobre los recursos naturales sino sobre la propia población originaria de la zona.
 
Si bien el caso del Putumayo y de la empresa de Arana resulta particular porque controló por sí misma una gran extensión y a una significativa población indígena, la violencia, el trabajo forzado y los abusos contra los indígenas amazónicos fueron la moneda corriente durante el auge gomero. Si tal extremo se morigeró no fue porque el Estado peruano intervino sino porque la crisis internacional de precios y la primera Guerra Mundial aniquilaron la producción amazónica.  
 
La publicación que hoy presentamos es un documento de primera mano sobre estos acontecimientos ocurridos en la primera década del siglo XX. Pero no es solo una fuente imprescindible para el conocimiento de la historia amazónica, sino que este año, en que se cumplen 100 años de su primera publicación, el LIBRO AZUL DEL PUTUMAYO se erige en Memoria de la inacción del estado, como lo ha señalado en Vice-Ministro (Se refiere al Vice-Ministro de Interculturalidad del Ministerio de Cultura del Perú presente en el acto), frente a las graves denuncias de violencia contra los pueblos originarios del Putumayo. La inacción fue incluso más allá porque el estado peruano negó los hechos por mucho tiempo alegando la necesidad de dar garantías al capital extranjero y atribuyendo las denuncias a motivaciones dañinas contra los intereses nacionales y señalando el derecho de la nación a prosperar a expensas de cualquier otro costo.
 
Termino señalando que se trata de una omisión con los pueblos del Putumayo que aún, tras 100 años no ha sido reparada, de palabra ni de obra.
 
 
NOTAS  PERSONALES MARGINALES:
Mario Vargas Llosa escribió su última novela “El sueño del  celta” inspirado en los diarios íntimos de Roger Casement y seguramente leyó también  El Libro Azul, pero fue el personaje quien lo fascinó tremendamente  porque evidentemente su vida y obra  fueron  excepcionales e increíbles , pero su  obra no llega a hacer justicia en su textualidad a las  sevicias y atrocidades   que derivadas del Colonialismo conformaron una de las Matrices  del Mal  como producto histórico y no ontológico , que fue un objetivo muchas veces expresado  por el Nobel Peruano pero  jamás logrado en ninguna de sus obras  ni siquiera a la manera  de sus ¿ex adorados? Sartre y Camus.
 
Contrariamente, en  casi solo  cien páginas de “El corazón de las tinieblas” el escritor  Polaco-Inglés Joseph Conrad (Józef Teodor Konrad Korzeniowski) nacido en Berdyczów, entonces Polonia, actual Ucrania, el 3 de Diciembre de 1857  y fallecido  en Bishopsbourne, el 3 de Agosto de  1924 Inglaterra, desentrañó  definitivamente con una maestría irrepetible  el Colonialismo Belga y su  maldad mezcla de  interés, vanidad, poder, avaricia, enfermedad mental y  otras distorsiones axiológicas no desconocidas a lo largo de la historia humana  que  se replicaron  en el Perú y  formatearon el Modelo Civilizatorio que actualmente  rige al mundo.
 
MVLL trató de acercase   a esa mirada del Mal que tanto lo  desvela ¿o desveló? en “La casa verde” y “Conversación en La Catedral ”, pero ambas, siendo obras  maestras, tratan realmente de arquitecturar al Perú y su imposibilidad de ser y del deterioro  estéril que lo frena ¿o frenaba?, porque últimamente sus declaraciones victoriosas sobre el país desdicen la célebre frase de Zavalita al salir del diario “ La Crónica ”  y mirar la Avenida Tacna y preguntarse ¿cuándo se jodió el Perú? al inicio de “Conversación en La Catedral ”. Asume otros muchos temas por supuesto, pero no llegó jamás a desentrañar El Mal que como un perseguidor cortaziano ha tratado de  abordar sin éxito.
 
Excepto  tal vez  en el personaje del “chino” Fushia,  de “La casa verde”, de   poderoso halo trágico. Sin embargo, el tratamiento que dio a la Amazonía peruana en sus novelas fue generalmente  superficial y absolutamente Externa, con muchas secuencias francamente  irrisorias.
 
Conocí en Río Santiago a toda una comunidad de  descendientes de japoneses apellidados  Tushia,  y los he visto en distintas zonas de la Amazonía y todas tienen el común denominador de ser  historias de vida emprendedoras que huyendo de los campos de concentración de la Segunda Guerra Mundial se metieron en la floresta  amazónica a rehacer sus vidas.
 
Fushia sin embargo es  un personaje inmejorablemente maldito, endemoniado e irrepetible,  aunque la visión que ofrece MVLL de los Huambisas (Wampis) es caricaturesca y de los Awajun ni se diga: es  nula. No los conoce. Si “ La Selvática ”  fue Awajun  se hubiera envenenado antes de correr su  peripecia piurana. Y si Jum de Urakusa también fue Awajun,  desdijo totalmente  la soberbia, orgullo y rebeldía de su etnia.
 
Discípulo confeso de William Faulkner, de quien  reinventó cuaderno y lápiz en mano sus tecnologías literarias y se auto sedujo por El Mal del Sur Profundo de  Yoknapatawpha en las entrañas y periferias del Mississippi, y a quien el “boom” latinoamericano le debe mucho, no lo condujo  a intuir El Mal, porque tal vez debió vivir más, visitar menos y toparse cara a cara no con sus recuerdos y bibliografías sino con los intersticios de las vidas con las cuales hay que convivir. No estoy haciendo crítica literaria sino expresando con todo derecho mis impresiones que tal vez profundice en otra oportunidad.
 
 
Pienso que MVLL es esclavo de su tecnología escritural y  tiene merecido su Nobel ya que se trata de  literatura , pero como ha sucedido con  muchos otros  escritores se repite y reitera como tratando de hallar la otra obra maestra que ya no llegará jamás.  “El sueño del celta” en verdad es una obra menor.
 
Lituma, otro personaje entrañable de “La casa verde”,  guardia civil, piurano y cholo, tampoco tuvo su  hora porque “Lituma en los andes” es otra simplificación reduccionista del senderismo y ciertos estereotipos  pseudo antropológicos de modo. El senderismo es un fenómeno maldito al que todavía nadie ha  calado a fondo. También es  caricaturesca y hasta esnob “El  hablador”. Ignora que en las cabeceras altas de los ríos Matsigenkas  sobreviven  no menos de diez clases de habladores con funciones sociales diferentes.
 
Mientras tanto, “Pantaleón y las visitadoras” es un  juguete semi cómico y pudo ser una indagación de la  doble moral y corrupción del Poder Militar en el Perú  sin dejar la ironía o asimilarla como método narrativo innovador.
Pero esa misma imposibilidad de  que el Perú sea  nación en toda su compleja diversidad( y mestizaje), entre otras  razones por las taras post-coloniales que sobreviven en  las instituciones subjetivas que nos  gobiernan como colectivo de colectivos, ya lo había diseñado  José María Arguedas con otras tecnologías literarias, tal vez más modestas, pero mucho más sinceras,  y sobretodo desde  adentro, desde el Interior de los Andes, desde el lirismo  íntimo y sufriente del quechua profundo agredido.
 
En las novelas de Arguedas no hubo cabida ni para la utopía ni el arcaismo porque era el otro Perú, aquel que no se veía desde Miraflores ni Lima pre- 40s, aproximadamente, y por el contrario, fue un profeta social porque Lima es ahora la ciudad pre-síntesis con mayor número de quechua hablantes y conviven en ella  migrantes de todo el país, y así como no existe familia peruana que no tenga a uno de sus integrantes en el exterior, se repite una movilidad social que data desde los primeros horizontes culturales peruanos.
 
Por ello resulta totalmente injusta y arbitraria su  “La  utopía arcaica….”, que todavía no ha merecido una respuesta antitética  párrafo a párrafo como solían hacerlo  los polemistas del  Siglo XIX y cito a Manuel Gonzáles Prada Francisco de Paula Gonzáles Vigil, por ejemplo.
 
Pero  es cierto que  la vida de MVLL es un ejercicio de rigor y tecnología y mediática y su noción de machacona modernidad no deja de ser “miraflorina” desarrollada y globalizada y  con una sospechosa impronta de impoluta aversión a todo lo que sea opuesto a su  visión de “modernidad”, “alta cultura” y “libertad”.
 
Se ha convertido en un fundamentalista  utópico. Lo siento como una  “liberal” trasmutación de   la “civilización y barbarie” sarmientista en  espacios globales donde la “modernidad” está discutiéndose su exacto significado, su “alta cultura” constituye una elitización de cierta producción artística ligada al gusto, muy alejada  de la cultura en su acepción antropológica que en el Perú es de evidente  diversidad que crea, siente y se comporta de acuerdo sus lógicas intrínsecas, y  de  la “libertad”, que en verdad es un proceso en construcción filogenética en curso, muchos de cuyos componentes  son históricos, económicos, sociales  pero también  cerebrales y su meandros aún desconocidos.
 
La vida de Arguedas en sí misma fue trágica en múltiples sentidos. Tuvimos un necesario agonista y  bipolar cultural que no soportó  que los diferentes perús no se entendieran. Y aquella obra maestra inconclusa: “El Zorro de Arriba y el Zorro de Abajo”,  hizo de Chimbote una inmensa metáfora fundacional de un país hacia la difícil síntesis, que continua buscándose y armandose solo, por sí mismo, con sus luces y sombras y al margen del Estado y de las Ideologías.
 
No tuvo tiempo de  hallar al Zorro Azul (lo afro)  y enriquecer sus  Diarios y sus  vericuetos infernales de la harina de pescado y sus barrios chimbotanos enloquecidos y el dialogo ya no de dos zorros sino de tres ¿Eso fue una utopía arcaica? ¿Eso fue indigenismo? El parricidio filial que necesitaba MVLL   lo  exorcizó literariamente, pero  lo ejecutó con conciencia profesional e impunemente en José María Arguedas, quien sí supo lo que era El Mal en el Perú.
WILLY GUEVARA
 
 
PRÓXIMA ENTREGA DE LISTASTEMATICAS:
“La chilenización de Tacna o la extirpación imposible”
 
 
1 CAAAP- Centro Amazónico de Antropología y Aplicación Práctica (Perú).
[2] IWGIA- Grupo Internacional de Trabajo sobre Asuntos Indígenas.
[3]FREDERICA BARCLAY-Antropóloga e historiadora peruana especialista en Amazonía.
[4] ALBERTO CHIRIF- Antropólogo peruano de larga trayectoria en defensa de los derechos y territorios de los pueblos amazónicos del Perú.
5 RÍO PUTUMAYO-El río Putumayo, del quechua Putu: vasija de fruto de árboles y Mayu: río: que nace donde crecen las plantas cuyos frutos son usados como vasijas. En Brasil  río Icá. Nace en el Nudo de los Patos en el municipio de San Francisco en los  Andes  colombianos y  desemboca en el río Amazonas. Tiene 1,800 Km .  y transcurre por  los países de Colombia,  Ecuador, Perú, Brasil.
 
6 ROGER DAVID CASEMENT, en irlandés Ruairí Mac Easmainn, nació en Sandycove, cerca de Dublín, Irlanda, el 1 de Setiembre de 1864 y murió en Londres el 3 de Agosto de 1916. Sir Roger Casement fue un diplomático  británico que militó activamente en la causa del nacionalismo irlandés. Es famoso por su actividad contra los abusos del sistema colonial en el Congo y en el Perú, así como por sus negociaciones con Alemania inmediatamente antes del  Levantamiento de Pascua en Irlanda. Descubierto y detenido por las autoridades británicas en 1916, fue acusado de traición y condenado a la pena capital
 
7 JULIO CÉSAR ARANA DEL ÁGUILA, fue un empresario y político peruano, cauchero, que nació en Rioja ( San Martín) en 1864 y murió en su retiro del distrito de Magdalena del Mar, en  Lima en 1952. Hijo de un sombrerero y sin educación universitaria .Arana se inició en el comercio y la explotación del caucho en Yurimaguas a partir de 1890. En 1899 se trasladó a Iquitos donde fundó su imperio de infamia.
 
8 Durante los sucesos del Putumayo los jueces CARLOS VALCÁRCEL y RÓMULO PAREDES cumplieron un papel fundamental en la condena de los caucheros. El primero publicó el libro EL PROCESO DEL PUTUMAYO, en 1915, en el que dio a conocer los pormenores que tuvo que atravesar para enjuiciar a personajes notables de las elites sociopolíticas. Por su parte, RÓMULO PAREDES redactó un informe junto a una biografía que permite conocer los detalles personales que llevaron al magistrado hasta el asunto Putumayo. Desde 1913 en adelante sus informes habían sido publicados varias veces tanto en inglés como en castellano, aunque en selecciones y traducciones parciales.  CORNEJO y CHIRIF publican en  su libro los informes de Paredes en su totalidad.
 
9 AUGUSTO BERNARDINO LEGUÍA SALCEDO nació en Lambayeque el 19 de  Febrero de 1863 y murió en Lima el 6 de Febrero de 1932. Ejerció   la Presidencia del Perú durante cuatro períodos: 1908 - 1912; 1919 - 1925 (con un gobierno transitorio previo); 1925 - 1929; y 1929 - 1930. A los tres últimos períodos, que suman once años consecutivos, se les conoce globalmente como el Oncenio. En total gobernó 15 años, siendo el mandatario peruano que más tiempo ha gobernado. Durante este largo mandato, Lima fue modernizada mediante la ejecución de obras públicas, financiadas mediante empréstitos y cuyo fin inmediato fue festejar apoteósicamente el Centenario de la Independencia Nacional en 1921. Creó el  Banco de Reserva y el Banco Central Hipotecario, así como los Estancos de Alcohol, Naipes y Fósforos. Legalizó las comunidades indígenas. Creó la  Guardia Civil del Perú. Fomento la construcción de carreteras y obras de irrigación. Firmó el Tratado de Límites con Colombia y el  Tratado de Límites con Chile, 1929, tratados muy controversiales que han motivado que se califique a Leguía de “entreguista”. Fue derrocado por el Coronel EP Sánchez Cerro el 25 de Agosto de 1930, siendo luego apresado e internado en el Panóptico de Lima. Allí enfermó gravemente y tuvo que ser trasladado al Hospital Naval del Callao, donde falleció en 1932

DECLARACIÓN DEL PUEBLO CHANKA-APURIMAC

DECLARACIÓN DEL PUEBLO CHANKA-APURIMAC

Nosotros, las organizaciones representativas de las comunidades y pueblos de Apurimac, como FARA, FEMURA, REDJA, CROAVPA, FERCCAPA, FRENTES DE DEFENSA y las comunidades de: Abancay, Aymaraes, Antabamba, Cotabambas, Chincheros, Grau y Andahuaylas;  reunidos en el FORO REGIONAL DE LOS PUEBLOS, en la ciudad de Abancay, del 11 al 12 de octubre del presente año, convocados por la CORECAMI APURIMAC; analizamos  los problemas en nuestras comunidades y coincidimos e identificamos que, en la actualidad el mundo, nuestro país y nuestra región, atraviesa por una serie de cambios y crisis, pues somos testigos y víctimas de las crisis: políticas, económicas y sociales. De los cuales el más resaltante y urgente problema a resolver es el cambio climático, al cual no somos ajenos, porque nos vemos afectados gravemente, así como nuestro medio ambiente, nuestra salud y por tanto nuestra calidad de vida.

Nuestra región, rico en recursos naturales, se ve seriamente afectada por estos cambios, nuestras comunidades y su población, que depende de dichos recursos experimentan y ven con preocupación e indignación, como esta situación se multiplica y sigue en avance, vulnerando sus derechos fundamentales.
Asumiendo como principal y directo responsable de esta crisis, a la aplicación del modelo neoliberal extractivista imperantes no solo en nuestro país, sino también en la mayor parte del mundo. Frente a lo cual nuestras comunidades se unifican y fortalecen, con el fin de proteger nuestra biodiversidad, medio ambiente, territorio, recursos naturales y en esencia nuestras propias vidas, apelando al respeto a nuestros derechos.
Nuestro país, hoy cuenta con un nuevo gobierno, en el que el discurso vislumbra y alienta propuestas de cambio, planteando crecimiento económico: Equitativo e Incluyente, para así empezar la transformación que tanto necesita nuestro país. Sin embargo, los recientes acontecimientos políticos, expresadas en iniciativas desde los poderes Ejecutivo y Legislativo, como la Ley de Consulta y el Gravamen Minero, acordado con las Empresas Mineras, no nos dan la seguridad ni convicción de que el Gobierno entrante, garantizará la incorporación e implementación de las visiones e intereses de los pueblos indígenas, en la ejecución de las políticas públicas del país.
Entonces, es en este escenario regional de las comunidades de Apurimac: Abancay, Aymaraes, Andahuaylas, Antabamba, Cotabambas, Chincheros y Grau, agrupadas en la Coordinadora Regional de las Comunidades  Afectadas por la minería. (CORECAMI-APURIMAC) Presentamos  nuestras demandas y conclusiones al gobierno y al sector empresarial minero. Tales propuestas y conclusiones responden a un arduo trabajo de debate y análisis, profundizado durante el FORO REGIONAL DE LOS PUEBLOS, que se llevó a cabo del 11 al 12 de octubre, del 2011, en la ciudad de Abancay. Reafirmándonos en nuestra obligación moral y el derecho de exigir al presente gobierno, la inclusión de nuestras demandas y propuestas y cumpla así, sus compromisos electorales y se reafirme y ejecute  el  reconocimiento, la protección y respeto de nuestros derechos humanos: individuales y colectivos.
Por tanto;
EXIGIMOS:
1,- Que la Ley de Consulta Previa aprobada, es un avance en la reivindicación política de las comunidades y pueblos  indígenas, pero también reconocemos, que tiene vacios técnicos en su contenido; por lo que exigimos que se precise y defina esos vacios en la reglamentación  de la Ley de Consulta Previa y se avance hacia una ley marco  para los pueblos indígenas y originarios.
2.- Las comunidades y pueblos  indígenas, necesitamos un espacio  de diálogo directo con el Estado Peruano en igualdad de condiciones para ello exigimos la restitución del INDEPA  de  acuerdo como fue creado con la ley primigenia con rango ministerial. Ya que el gobierno no da señales de un posible debate, en la agenda publica, sobre el tema de fondo, como es el extractivismo, lo cual se traduce en la irracional explotación de nuestros bienes y recursos naturales, con consecuencias catastróficas como son la depredación, saqueo, contaminación y vulneración de los derechos, reconocidos por Tratados Internacionales como el del convenio 169 de la OIT y la ONU.
3.- Las comunidades, convenimos y acordamos que  el Proyecto Las  Bambas y otros  no cumplen con los  mecanismos  de  consentimiento previo, libre e informado;  como requisito previo para obtener la licencia social, la aprobación del estudio de impacto ambiental del proyecto las Bambas es ilegitimo, porque no contó con las condiciones de participación de los comuneros de Cotabambas. Por ello, es necesaria la revisión del estudio de impacto ambiental del Proyecto Las Bambas, y que se adecue  al proceso de consulta previa de toda la provincia de Cotabambas; por lo que proponemos al Ministerio del Medio Ambiente como principal y único Ente Rector y Regulador, para definir y concretar los estudios de Impacto Ambiental.
 
 
4.- Más del  60% del territorio Apurimeño, se encuentra  con concesiones mineras las cuales han sido dadas sin previa consulta  ni conocimiento de las comunidades  y pueblos de Apurimac, por tanto carecen de  legitimidad; por lo que  exigimos la anulación de todas las concesiones mineras en Apurimac, y se entable un Proceso de Zonificación  Económica – Ecológica, para un ordenamiento territorial  con participación de las comunidades. Así mismo exigimos  la Creación e implementación de una Comisión de la Verdad, con respecto a la Minería la cual se encargue de investigar el desempeño de la Minería, desde la época de los 90, para que en un plazo razonable se informe al país y a la nación la situación real de los impactos sociales y ambientales ocasionados por la Minería,
5.- No permitiremos, que  se  sigan hostigando y judicializando a nuestro dirigentes y líderes  comunales, (como en el caso de hostigamientos de la empresa Soutern  Peru CC en la Comunidad de Tapayrihua)  solo por el hecho de  defender nuestro  Buen Vivir y nuestra Pachamama. Exigimos Derogatoria revocante de los Decretos Legislativos que criminalizan la protesta social, instamos a la Defensoría del Pueblo,  al Ministerio del Interior y a las instancias como Derechos Humanos; investigue y levante un informe sobre los excesos de la función policial, judicialización y criminalización a dirigentes comunales y líderes sociales en la Región de  Apurimac.
6.- Es inminente, que el cambio climático ya está afectando  nuestra región y, muchas de nuestras comunidades están vulnerables a ello, y más aun esto se agrava con la presencia de empresas mineras en cabeceras de cuenca, ( cuenca del rio Antabamba, chalhuanca, vilcabanba, y el rio pampas)  poniendo en riesgo así el abastecimiento de recursos hídricos para uso agropecuario y humano; por lo que  exigimos que se prohíba la minería a tajo abierto y se  declare las cabeceras de cuenca de Apurimac como  zonas intangibles y libres de  minería.
7.- Exigimos, la restitución del Derecho  de Propiedad al Territorio, que se nos fue quitado con la llegada de los españoles y la instalación de la colonia, habiendo pasado ya más de 190 años de vida republicana, hasta hoy no se nos  ha restituido este derecho a las comunidades, forma en la que los pueblos originarios estamos organizados.
8.- Las comunidades  y pueblos  de Apurimac no cederemos más territorios, donde las empresas  extranjeras y capitalistas  saqueen y solo dejen  más pobreza y contaminación, no aceptaremos más el saqueo, solo aceptaremos un proyecto minero viable con  capital extranjero, si las comunidades tenemos participación societaria y se brinde garantías jurídicas a nuestras propiedades territoriales, garantizándose el control y sanción ambiental efectiva, Para ello exigimos la dación de políticas públicas que garanticen su exigencia.
9.- El aumento de la minería informal  en territorios comunales instigados muchas veces por agentes  y operadores de las empresas transnacionales, quienes vienen generando enfrentamientos entre comuneros,  esta nueva forma de conflictos para justificar la entrada de empresas mineras transnacionales a territorios comunales viene haciéndose con complicidad de autoridades regionales y locales por lo que denunciamos y alertamos  a todas la autoridades competentes. Para que se tome las medidas necesarias.
10.- Responsabilizamos, al gobierno nacional y a las Empresas Mineras de las consecuencias y medidas que las comunidades  vayamos a  tomar, para defender nuestros territorios y nuestras propiedades colectivas, de los abusos y contaminación que venimos  sufriendo, por  parte de las políticas de imposición  de la minería transnacional en  nuestros territorios.
11.- Por último; damos un plazo máximo de 6 meses, razonables para que tanto el gobierno  nacional, regional, local y las instancias correspondientes, hayan implementado los  acuerdos de esta conclusiones  de las comunidades y pueblos de Apurimac, vencido el plazo volveremos a llamar a un encuentro, para evaluar el cumplimiento de los acuerdos y tomar medidas  que aseguren la implementación de los mismos.
 
Ciudad de Abancay 12 de octubre del 2011
Foro Regional de los Pueblos de Apurimac en el marco de la  movilización  de la  MINGA GLOBAL por la defensa de la pachamama y el ambiente

DEBATE DE LA DEBACLE

DEBATE DE LA DEBACLE

 Anoche, el país entero pudo ver a dos pobres diablos tratando de superar sus propias taras, dos mandriles dándose de macanazos, tratando de leer de reojo para superar a su rival y tratando de empinarse sobre sus medianías, cosa que ninguno lo logró. En el mejor momento parecían dos estudiantes de primaria dando el examen oral de educación cívica, o un par de cojudos con lenguajes limitados hablando en verbos indefinidos y con la capacidad de comprensión de un fronterizo. Una lástima total. En suma de cuentas, una función de enanos, lisiados y discapacitados mentales para este circo electoral 2011 que ya tiene el olor y el color del Tang-Kanú-Tampico. No obstante, es claro que Keiko tenía todas las de perder. Ante una posición indefendible por todo lo que se ha dicho y lo que se ha demostrado hasta el hartazgo (y solo a las pruebas me remito; ya estoy cansado de teclear lo que todo el mundo ya sabe). La única arma con la cual podía hacer daño y lacerar a su oponente, o sea la mentira-el cinismo-la maldad política-etc., etc., la uso de la mejor manera, diciendo que Ollanta es un mentiroso (“no mienta, Comandante”), un acusado por violar los derechos humanos (“hay un testigo que dice lo ha visto matar a 6 personas”), y que ella se había enfrentado a su padre putativo (“Yo me enfrenté a Montesinos”), y eludiendo como áspid las preguntas que tímidamente le lanzaba Ollanta como si estuviera en un programa concurso de televisión donde el premio fuera una tabla de planchar, o, peor, como si el sindicado por corrupción, por desfalco, asesinato, robo y barbarie atroz, fuera el mismo sonso de Ollanta (increíble ver a alguien acusar a otro por crímenes y hacerlo como si tratara de una deuda de cinco soles o como si estuviera pidiendo que le conviden un cigarrillo), y, que, a pesar de todo –y espero que entiendan esto porque duele reconocerlo--, es la única carta democrática que nos queda –lo queramos o no-y tenemos que cerrar filas para evitar la captura del Estado en manos del aprofujimontesinismo, el mismo que ya viene preparándose para el fraude. Lo dicho ayer por Mulder de que en el Perú no hay fraude electoral desde 1965, las disculpas aprioris de Magdalena Chu acerca de la seguridad del proceso electoral: "el fraude es imposible", el artículo de Barba Caballero en el pasquín Correo de hoy: “hablarán de fraude, de sicosociales alanistas, de conspiración mediática, e intentarán crear las condiciones para un golpe de Estado popular, tal como sucedió en Bolivia, etc., etc.,” son una prueba más de que realmente se cocina un FRAUDE bajo la idea de legitimidad dada por la elección y por los mecanismos comprados de las putrencuestadoras, financiadas por los mismos empresarios del miedo, empresauros avarientos, dueños de los aparatos de producción de este país de cartón piedra. Quizás el momento más álgido del debacle fue cuando la “señora” Keiko, desbordando odio e insania, dijo que el debate era entre ella y Ollanta y que el equipo lo había convocado ella y no su padre y que, si quería debatir con Alberto Fujimori, tenía que ir a la Diroes. Eso sí fue un acto patológico de sinvergüencería y un pequeño sckech de cómo seguiría gobernando el país ese endriago llamado “Fuerza 2011”. Madriguera de aquellos 200 funcionarios del Estado que están presos (78 todavía aún siguen en esta condición en los penales de la capital) o que están fugados de la justicia escondiéndose como ratas y que de seguro están esperando que Keiko gane las elecciones para regresar a “colaborar con el país” y convertir al Estado en la cueva de ladrones y asesinos para darnos el título que, con tantos errores, ya estamos a punto de obstentar: Un narco-Estado, al igual que Kosovo, Guinea-Bissau, México o Guatemala . Algo que tenemos que apuntar es que si bien Ollanta carece de intelecto para gobernar este país, cuenta con asesores y el respaldo de un equipo técnico que ha demostrado estar mejor preparado (lo vimos en el debate de la semana pasada) que el de Keiko (con la misma masa cerebral de Kenji), que al fin y al cabo sólo arrastra la misma recua tecnocrátas (léase grupos Colinas, traficantes, tránsfugas, traidores a la patria, etc.) que su padre, el ladrón y asesino, Alberto Kenya Fujimori; sólo faltaría restituir a Hurtado Miller, que ahora goza de arresto domiciliario y a Vladimiro Montesinos que está, según fuentes cercanas, casi en las mismas condiciones, el resto están al pie del cañón apuntando hacia el pueblo. En caso gane Keiko Fujimori --que no sólo “tuvo la mala suerte de ser la hija de un dictador”, como dice el imbécil de Bayly en Perú 21, sino que encarna la continuidad inmoral de su padre--, no me cabe la menor duda que presenciaremos un caso de ripley, propio de un país del áfrica subsahariana, donde un reo probado y comprobado (y ejemplo mundial de cómo se podría haber castigado a un tirano) va a pasar de la cárcel al palacio de gobierno, del escupitajo y la cuarentena al aplauso, al baño de multitudes y al “resarcimiento cívico”, con medalla del congreso y bendición papal (por lo menos ya tiene la bendición del purpurado y odiado cardenal Cipriani, que si pudiera sacaría al cristo de pachacamilla con el rostro de Fujimori. Total ya lo hizo antes en los noventas, sacó la procesión en marzo para ayudar en las psicosociales del doc y domeñar al ganado electoral con el cuento del castigo divino. Anatema y profilaxia: ¿Si existe dios, a quién representa Cipriani?). Una lástima, nunca pensé que terminaría escribiendo esto: O votamos por Humala o nos vamos por el wáter.