JULIO CÉSAR EXTRAVIADO EN EL INFIERNO
Creo que ibas cansado, cuatro insectos te arrastraban; aunque sonreías detrás de los cristales, tu dolor era inevitable.
¿Cuándo volverás a la casa de la abuela?
tu madre dice que regresaste, convertido en libélula.
Te han visto por las calles de Huaraz, tocando el timbre los amigos, solo por molestar. Como siempre.
No has cambiado mucho.
Pero como pasaste de un estado de certeza a incertidumbre.
Ya no sé como te llamas, de tu nombre de emperador no quedan más que las vocales, para que un llamado Artur Rimbaud, un siglo atrás, componga su poema.
¡Que ironía!
Adiós amigo, quédate en tu sarcófago revolcándote con tus insectos de fuego atardecer, con la ilusión de volver a besar a tu metafórica Cleopatra.
Adiós,
aunque sé, volverás con el viento del olvido.
Quisiera ya no volver a verte.
EL TREN
XIX siglos y medio que esperas el tren,
¿A dónde iras?
¿Londres, París?
O clásicamente a los United States Of American.
No te ilusiones,
No eres tu la que se va.
Recuerda tu mirada extraña,
Desnuda ante el espejo,
Mientras practicabas aquel peinado francés
Tan solo para verte.
Allí
Toda tú quedaste.
Coge tu mano,
Coge tu maleta vacía y vete si quieres.
Ni en la maleta que llevas estás tú,
Bien sabes que es nueva.
Oye la voz del tren, a lo lejos.
Si lo oyes también comprenderás que no es el tren.
Soy yo
JOULE CACERES
¿Cuándo volverás a la casa de la abuela?
tu madre dice que regresaste, convertido en libélula.
Te han visto por las calles de Huaraz, tocando el timbre los amigos, solo por molestar. Como siempre.
No has cambiado mucho.
Pero como pasaste de un estado de certeza a incertidumbre.
Ya no sé como te llamas, de tu nombre de emperador no quedan más que las vocales, para que un llamado Artur Rimbaud, un siglo atrás, componga su poema.
¡Que ironía!
Adiós amigo, quédate en tu sarcófago revolcándote con tus insectos de fuego atardecer, con la ilusión de volver a besar a tu metafórica Cleopatra.
Adiós,
aunque sé, volverás con el viento del olvido.
Quisiera ya no volver a verte.
EL TREN
XIX siglos y medio que esperas el tren,
¿A dónde iras?
¿Londres, París?
O clásicamente a los United States Of American.
No te ilusiones,
No eres tu la que se va.
Recuerda tu mirada extraña,
Desnuda ante el espejo,
Mientras practicabas aquel peinado francés
Tan solo para verte.
Allí
Toda tú quedaste.
Coge tu mano,
Coge tu maleta vacía y vete si quieres.
Ni en la maleta que llevas estás tú,
Bien sabes que es nueva.
Oye la voz del tren, a lo lejos.
Si lo oyes también comprenderás que no es el tren.
Soy yo
JOULE CACERES
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